Nos cuentan orgullosos los políticos vendepatrias que padecemos, que "Canarias" se está convirtiendo en un "fantástico" plató para las productoras cinematográficas internacionales. Y ellas, a sabiendas de que en esta colonia, estamos acostumbrados a ponérselo fácil y gratis a toda empresa de fuera, mientras se asfixia a la de aquí, han recibido alucinadas, que no tengan que pagar ni un sólo euro en impuestos por rodar aquí. Crean empleo dicen y sin embargo, como ejemplo, resulta que en las dos últimas producciones (alemana e anglocatalana), el 85% de los contratados no eran de origen canario. Más aún, las productoras, con todo el descaro del mundo, plantean en sus casting que "se valorará hablar en castellano neutro y otros idiomas". Los canarios, otra vez, de "atrezzo" o meros figurantes en todo escenario. Discriminación descarada y consentida.