
Intersindical organiza una campaña para la protección del emblemático icono natural del País


Semanario LA RAÍZ
Las calles de Las Palmas de Gran Canaria se preparan para una protesta histórica. Este 23 de noviembre, una cadena humana recorrerá puntos estratégicos de la ciudad para rechazar la instalación de una central térmica en el Puerto de la Luz. Convocada por colectivos ecologistas y vecinos, la movilización pone el foco en las contradicciones de la política energética insular, dejando en evidencia la incoherencia de dirigentes como Antonio Morales, presidente del Cabildo de Gran Canaria.
Una central que amenaza el aire y la vida urbana
El proyecto, liderado por la empresa Totisa Holdings, busca instalar una planta de gas natural de 70 megavatios junto con una regasificadora y un depósito de 50.000 metros cúbicos de gas licuado. Aunque sus defensores aseguran que el puerto necesita garantizar su autonomía energética, los críticos subrayan el impacto negativo que tendría en la calidad del aire y el bienestar de los habitantes de la capital grancanaria.
“El gas natural no es energía limpia ni sostenible. Este proyecto es un retroceso para la salud de la ciudadanía y el futuro de Gran Canaria”, denunció un representante de la plataforma ciudadana contra la central. Sin embargo, la instalación de esta planta es solo la punta del iceberg de un modelo energético que cada vez enfrenta más oposición.
Antonio Morales: discurso verde, prácticas devastadoras
Antonio Morales, uno de los más vocales detractores de la central, ha calificado el proyecto como una “agresión ambiental”. Pero muchos cuestionan su legitimidad para criticar, dado que bajo su administración se han impulsado proyectos igual de cuestionables. Uno de los ejemplos más controvertidos es la hidroeléctrica Chira-Soria, que devastará uno de los paisajes más emblemáticos de la isla, todo en nombre de una supuesta transición energética.
El presidente del Cabildo también ha defendido planes urbanísticos que incluyen la creación de miles de camas turísticas adicionales, intensificando la presión sobre ecosistemas ya frágiles como el Banco de Arguineguín. Al mismo tiempo, ha promovido la instalación masiva de parques eólicos y solares sin una planificación estratégica adecuada, lo que ha generado conflictos con comunidades locales y un impacto severo en el paisaje.
El Puerto de La Luz, entre la espada y la pared
La Autoridad Portuaria de Las Palmas justifica la central térmica como una necesidad para evitar depender aún más de la central de Jinámar, cuya contaminación ya afecta gravemente a los municipios colindantes. Sin embargo, esta narrativa no convence a los expertos, quienes señalan que el debate no debería limitarse a elegir entre dos males, sino buscar soluciones verdaderamente sostenibles.
“Plantear esta dicotomía es una falta de visión. Gran Canaria tiene el potencial para liderar una transición energética real, pero no con proyectos improvisados y contaminantes”, señalan desde la plataforma Canarias Libre de Combustibles Fósiles.
La protesta: ¿un símbolo o un punto de inflexión?
La cadena humana de este 23 de noviembre representa más que una simple protesta. Es un clamor ciudadano contra un modelo energético y político que prioriza los intereses económicos sobre la sostenibilidad real. Los organizadores llaman a replantear de raíz cómo se planifica el futuro energético de Gran Canaria.
“Mientras se rechaza una central térmica en el puerto, se permiten proyectos igual de destructivos como Chira-Soria o la expansión turística masiva. Es hora de exigir coherencia y responsabilidad a nuestros dirigentes”, declararon desde la organización.
La cadena humana es un símbolo de resistencia, pero también una llamada de atención para Antonio Morales y otros líderes insulares. No basta con oponerse a un proyecto puntual: la transición energética debe ser un compromiso integral, coherente y respetuoso con el territorio y su gente. Gran Canaria necesita soluciones reales, no promesas verdes que enmascaran un desarrollo insostenible.

Intersindical organiza una campaña para la protección del emblemático icono natural del País

Un estudio del Centre d’Estudis Demogràfics (UAB) sitúa a Santa Catalina–Las Canteras como el área más gentrificada de Las Palmas de Gran Canaria, con un índice de 0,55 (sobre 1): el mismo orden de magnitud que el promedio de Barcelona. La transformación, de momento localizada, avanza del centro hacia la costa —Triana-Vegueta y, después, Guanarteme— y vuelve a poner una pregunta incómoda sobre la mesa: quién puede permitirse vivir en la capital cuando el alquiler se dispara en una isla.

Un tablero de tres metros con el mapa del Archipiélago y una baraja de embarcaciones —del yate de lujo a la patera— han servido estos días para poner a la gente a decidir, en plena vía pública, qué entra y qué no entra en Canarias. El colectivo Left Hand Rotation lleva su intervención Abordaje, un juego con límites a las islas para abrir conversación sobre turismo masivo, vivienda, migración y contaminación: el mismo debate que el poder suele aplazar.

El Congreso de los soberanistas de LC ya tiene fecha. Será el 10 de Enero y tendrá como lugar de celebración la capital grancanaria. Los dirigentes de Liberación Canaria afirman que "el discurso de otras formaciones que se dicen nacionalistas, está agotado y que su propuesta política es insuficiente para los problemas y retos que tiene delante el País". "Frente a la falsa autonomía que defienden, a izquierda y derecha el resto de los partidos, Liberación Canaria reivindica que los canarios podamos tener un autogobierno real y pleno", afirman.

Toma cuerpo una amplia respuesta al belicismo y la urgencia de que Canarias se blinde ante esa corriente de barbarie. La Raíz publica el Comunicado íntegro.

El Maestro, escritor, articulista y desde hace años también académico de la Lengua Canaria, Víctor Ramírez, es sin duda una de las mentes más preclaras y brillantes del pensamiento canario del siglo XX y lo que llevamos de siglo xXI. Para muchos su capacidad y solvencia como domador de la palabra y su expresión escrita está al nivel de muchos de los premios internacionales de la literatura universal, pero le tocó ser canario y además tener ideales libertarios e independentistas y eso fue usado por sus detractores para invisibilizarlo. No lo consiguieron. Con más de 200 títulos y obras en distinto formato, Ramírez ha sido siempre ese guerrero guanche que se supo mantener alzado en la escuela, en la literatura, allí donde puso su objetivo. Este viernes recibirá un homenaje muy merecido allí donde más lo agradece, en el ámbito de las personas que como él, están comprometidas con Canarias. Atentos al lugar y al horario.

El historiador Rumén Sosa Martín ha anunciado estos días, a través de sus redes sociales, la publicación de La muerte de la lengua guanche, una obra que no solo explica cómo casi desapareció el idioma indígena de Canarias entre los siglos XV y XVII, sino que ilumina uno de los procesos más decisivos —y menos contados— de nuestra historia. Fruto de siete años de investigación, el libro convierte una tesis doctoral en un ensayo imprescindible para comprender quiénes fuimos y por qué hablamos como hablamos hoy. El legado de "aquellos" aún siembra mucha de nuestra toponimia, nombres y léxico hoy. Y es que nunca murieron, porque siguen en nosotros

Si nadie lo remedia, Las Palmas de GC podría tener un alcalde de VOX en 2027. No,no exageramos ni un pizco. La ultraderecha está en estos momentos a muy poco de obtener un concejal más que el PP y ser la fuerza política más votada de la derecha en este municipio. El PSOE baja en votos y concejales. Nueva Canarias y Podemos desaparecerían del consistorio. La mayoría absoluta de ambas derechas está casi cantada. La ciudad más poblada de nuestro País gobernada por la ultraderecha española es un hecho que debería hacernos reaccionar. Aquel día en que UPC le ganó la alcaldía al franquismo, ¿no puede ser otra vez posible?

Un tablero de tres metros con el mapa del Archipiélago y una baraja de embarcaciones —del yate de lujo a la patera— han servido estos días para poner a la gente a decidir, en plena vía pública, qué entra y qué no entra en Canarias. El colectivo Left Hand Rotation lleva su intervención Abordaje, un juego con límites a las islas para abrir conversación sobre turismo masivo, vivienda, migración y contaminación: el mismo debate que el poder suele aplazar.

Un estudio del Centre d’Estudis Demogràfics (UAB) sitúa a Santa Catalina–Las Canteras como el área más gentrificada de Las Palmas de Gran Canaria, con un índice de 0,55 (sobre 1): el mismo orden de magnitud que el promedio de Barcelona. La transformación, de momento localizada, avanza del centro hacia la costa —Triana-Vegueta y, después, Guanarteme— y vuelve a poner una pregunta incómoda sobre la mesa: quién puede permitirse vivir en la capital cuando el alquiler se dispara en una isla.

En el año 1464 se firmó el Acta del Bufadero (en Tenerife, entre conquistadores y guanches. Ello supuso, junto al posterior proceso de conquista, el inicio del desmantelamiento de una realidad cultural y de una organización territorial ancestral, la guanche. En el achimenceyato de Addar ode La Punta del Hidalgo, los guanches mantenían vivas por entonces sus creencias, a pesar deque eran conscientes de que Masheghó, su guañameñe, ya había anunciado que se avecinabantiempos difíciles tras la llegada de los extranjeros por el mar.