700 CANARIOS SE SUICIDARON ENTRE 2020 Y 2023

Entre 2020 y 2022, cada 36 horas una persona se quitó la vida en Canarias y otras 3 lo intentaron. De estas últimas, al menos dos fueron dadas de alta por el SCS, enviadas a casa y derivadas a servicios de salud mental que, como mínimo no les verían hasta un mes después. Cientos de familias condenadas al pavor de pensar que sus familiares podrían volver a intentarlo en cualquier momento o a dejar sus trabajos para que esto no pasara. 

Esta es sólo la punta del iceberg de la problemática de la salud mental en Canarias. Y decimos punta porque, atendiendo a estos datos, que reflejan aquella realidad estadística que ha permanecido en secreto, no es difícil suponer en qué estado se encuentra el grueso de los casos que dibujarían el retrato completo (depresión, angustia, ansiedad, etc). 

Según cifras oficiales, Canarias es el lugar del Estado donde más ansiolíticos y antidepresivos se recetan y consumen. Dramático dato, más cuando es España la que encabeza el ranking en la UE. Y esto no significa que la comunidad médica española sea muy laxa a la hora de recetar, sino que la ausencia de respuesta de las autoridades canarias de todos los gobiernos de la última dècada es, por omisión de socorro, absolutamente delictiva y criminal.

La "herida emocional" que está produciendo en la sociedad canaria unas condiciones de vida muy precarias y complejas es ya muy profunda. Hay una "hemorragia de sufrimiento" que se extiende en amplios segmentos sociales y que nadie parece dispuesta a placar. 

Teniendo las condiciones naturales para ser una sociedad feliz y "afortunada", hay quien no parece dispuesto a ceder para que económica y socialmente sea así. Todos sabemos dónde están los detonantes de esta "epidemia de malestar vital" que nos rodea, pero al tiempo hay quien ha decidido "dejarnos enfermar y morir" porque "el negocio colonial es lo más importante".

Quién tiene los salarios más bajos y la cesta de la compra más alta. Quien sufre no poder llegar a fin de mes, pagar el alquiler, ser cocido a impuestos, vivir con un subsidio de 480 euros o una pensión. Quién es parado de larga duración por tener más de 50 años y no llegó apenas a cotizar para ayudas, sabe que el problema no se soluciona con ansiolíticos. 

El colonialismo mata y el capitalismo salvaje asesina. Sí, porque estructuralmente todo lo que convierte nuestras vidas en un galimatías constante, tiene que ver con un modelo político, social y económico que "perjudica seriamente la salud" de quienes aquí vivimos. 

El problema de la salud mental es global sí, pero en aquella parte del planeta en la que nos ha tocado nacer o vivir es ésta, y es aquí y pronto donde debemos actuar.

Fuentes oficiales SCS

2020: 208 suicidios

2021: 230 sucidios

2022: 223 sucidios