
La conciencia negada: por qué un pueblo colonizado no se reconoce como tal
Una mirada al caso del pueblo canario
La manifestación del próximo domingo, 18 de mayo, dará cuenta del estado de malestar que existe actualmente en las islas. Bajo el lema de salvar Canarias, o aquí no hay quien viva o ya no podemos más, saldrán, saldremos este domingo a manifestarnos.
Sobran razones para hacerlo, visto que el presidente del Gobierno se ha mostrado incapaz de hacer oír la voz de Canarias en España, aún existiendo una ley que así lo constata como en el caso de los inmigrantes. Porque ya hemos comprobado que no tenemos voz en el parlamento ni políticos por muy ministros que sean, que nos representen.
Sobran razones cuando los canarios son expulsados de sus barrios, de sus casas porque el precio de los alquileres ha crecido a un ritmo inalcanzable para los sueldos de nuestra gente.
Sobran razones cuando se apropian de las costas y playas públicas, que privatizan de forma fraudulenta los grandes hoteles, muchos de ellos ilegales y con sentencia firme de derribo.
El pueblo canario no puede más, basta ya de tener que soportar la destrucción de nuestro paisaje, con apenas multas irrisorias a turistas
Basta ya de sufrir constantes atascos en las carreteras por el exceso de población foránea y del servilismo a unos empresarios depredadores que abusan de los trabajadores y no respetan esta tierra. Canarias no puede ser el parque temático de Europa, por eso el domingo dieciocho saldremos a la calle a pedir una vida digna.
Esta manifestación no es contra los turistas, ni para criminalizar a quien viene a pasar unos días de vacaciones en nuestra tierra, pero sí contra la industria turística, la que paga los salarios más bajos del estado español, y contra los empresarios depredadores y políticos pusilánimes.
Porque hay un sentimiento generalizado de que desde la península no nos oyen, nuestros problemas no importan y somos ninguneados y silenciados por el poder central, nuestra voz debe ser alzada. Una voz alta y fuerte que diga que ya estamos hartos, que ya no podemos más, que hay que poner límites, que no hay que pedir sino exigir. Urgen soluciones si queremos evitar la total destrucción de nuestro territorio.
Hoy más que nunca, es necesario que se ponga ya límites, como hacen en otras islas ultraperiféricas, a la compra de viviendas por parte de extranjeros adinerados que nos expulsan de nuestras tierras.
No podemos soportar más de 18 millones de turistas al año, cifra recórd en el 2024, porque estos a la vez consumen agua, luz, recursos sanitarios y hospitalarios hechos para los dos millones de canarios que vivimos aquí.
Este modelo turístico no es sostenible cuando sufrimos en pueblos cortes de agua o de luz y la población vive con tantas carencias y precariedad, mientras la mano de obra extranjera crece cinco veces más que la local.
Atravesados por un desbordante capitalismo donde el beneficio es lo que cuenta, la clase política se ha olvidado de que lo principal es el bienestar de los que vivimos aquí.
No puede ser que esta nación, desmembrada, fragmentada se haya convertido en la isla de San Borondón que solo aparece para el estado español cuando le interesa.
Hemos aguantado demasiado, hemos sido paciente, hemos esperado, pero el pueblo no puede más, por eso saldremos a manifestarnos el domingo, para que nuestra voz se escuche alta y clara.
Una mirada al caso del pueblo canario
MÁS DE LA MITAD DE LOS INGRESOS TURÍSTICOS DEL ARCHIPIÉLAGO SE TRIBUTAN FUERA DE LAS ISLAS, LIMITANDO SU IMPACTO ECONÓMICO LOCAL
Las redes sociales estallan de indignación ante un nuevo acto inmoral de toda la clase política canaria. Aquellos expertos que iban a "canalizar las demandas de la calle tras las manifestaciobes del 20A", debieron "aconsejar" no sólo el desprecio a los centenares de miles de canarios que pedían un cambio, sino que " en el FiTur de este año" hay más políticos que nunca antes "viviendo la vida loca". Vergüenza e indignación.
¿Recuerdan aquella "coalición internacional" que se montò para bombardear e invadir Irak?. ¿Recuerdan la "foto de las Azores" y como Naciones Unidas se creyó lo de "las armas de destrucción masiva?. Pues hagan menoria. Aznar, Fox, Calderón, Uribe, Bukele, Milei y Blackwater detrás de un golpe extranjero para derrocar a Nivolás Maduro. Venezuela "no puede ser desobediente", pero sobre todas las cosas no puede ser un país inmensamente rico en recursos minerales y petróleo y "administrarlos para sí mismos". De ahí tanto foco internacional, tanto castigo, tanta "movilización" de políticos cuyo curriculum en sus países ha sido tan ejemplarmente....corrupto y vendepatrias.
No es la historia misma, sino como te sitúas ante ella. Hace tiempo que sabemos que aquellos que nos precedieron también somos nosotros mismos, ¿o tus bisabuelos no son parte de ti?. ¿Irías tú mismo al cementerio a sacar sus restos para exhibirlos en vitrinas o para venderlos?. ¿Permitirías que sobre sus tumbas se levantarán apartamentos o que sobre su memoria se levantaran falsos testimonios?. Y no, esto no es guanchismo o pretender "rizar el rizo", sino devolver al rango de humanidad y racionalidad lo que han convertido en trivialidad. Somos nosotros, no ellos. Son "los nuestros. Si pretendemos reivindicarnos, empecemos por los vivos sí, pero basta de no honrar a nuestros muertos. Ciencia, claro que sí, pero respeto también.
Los grupos ultraderechistas siempre han sido la expresión más radical del capitalismo. Nunca representaron los ideales de la humanidad,la justicia, la igualdad, el progreso o la libertad. La mayor parte de sus expresiones históricas han venido acompañadas de la violencia, el terror y la muerte: la negación de la vida. ¿Quien va a creer que su negacionismo va a ser ahora algo diferente?
Samuel Henríquez, Mercedes Díaz y Juan Campos han pasado de ser los "predilectos" de Carmelo Ramírez a " venderse" como acérrimos defensores del chiringuito de Teodoro Sosa en el municipio sureño. La militancia que bien conoce las andanzas de estos tres "personajes" filtran el perfil, la "cara B" o C de caraduras de quienes ahora se disfrazan de renovación y fueron los "correveidiles" de Carmelo Ramírez desde siempre.
Un grupo de jóvenes poetas canarios toma el relevo de aquellas voces que en otras décadas dieron forma a la disidencia, la resistencia y la rebeldía a la sociedad que les rodeaban. Ahora, en una obra poética conjunta, toman de nuevo la palabra, la mejor palabra, la poesía.
UN MANIFIESTO PARA EL18 DE MAYO
¿A la tercera va la vencida?. Probablemente faltará mucho más.Esta cita del 18M es importante, pero aún lo será más, aquella otra donde tanta fuerza disidente sea consciente de que la victoria no llegará sólo con manifestaciones. En Canarias la democracia está secuestrada y la dictadura tiene rostro colonial.