Para algunos, eso de la españolidad de Canarias es más cosa de estómago, amigdala y visceras que de verdadero sentimiento. Digamos que les conviene y adornan para no tener que afrontar su indignidad. Por eso, cada vez que llega una competición deportiva, colonos y renegados visten parejo su exaltación futbolera e ideológica, y sacan a pasear su atrezzo patriotero como si no hubiera un mañana. A lo mejor, porque no lo hay,pero eso para ellos parece que es lo de menos.Lo demás resulta ser que, tras un título de "su Roja", al dia siguiente,
seguirá siendo un pobre escudero. Ramón Moreno nos da su opinión al respecto.
Hablando de aguas, algunos andan ahogados en un mar de confusión. Y si todavía fuera que, por su ignorancia calculada, fueran los únicos en peligro de morir ahogados, allá su destino. Lo malo es que la ignorantación pretendida es la del pueblo canario y en esa empresa no vamos a ayudarles porque, como ya es costumbre en estos trileros de la palabra, lo que viene después es traición y robo a Canarias por parte de un Estado delincuente.
Las impresentables declaraciones del consejero Julio Pérez, en referencia al tema de la soberanía de los espacios marítimos que rodean Canarias, tienen cumplida y argumentada respuesta en este artículo del experto canario en Derecho del Mar.
A resultas de la entrega y afán de la consejera YAiza Castilla por "inundar" nuestro país con más turismo de masas y esa otra modalidad tan polémica que representa los llamados "nómadas digitales", nuestro colaborador Ramón Moreno entra de raíz en el meollo de la cuestión de base: ¿qué nos deja a los canarios de beneficio real y dónde estaría ese supuesto y tan necesario "efecto multiplicador", de las que sí gozan aquellas actividades económicas en países que sí se pueden caracterizar de serios?.
CANARIAS
27 de octubre de 2022
Ramón Moreno Castilla
La realidad política española y canaria recuerdan muchas veces a aquella famosa película que hacía alusión a la celebración del Día de la Marmota. En ella el protagonista se veía envuelto en un bucle temporal por el cual todos los días parecían iguales, repetidos, sin diferencia alguna. Rescatamos hoy en La Raíz un artículo de Octubre de 2010, donde Ramón Moreno Castilla describe como Estado forajido a España y aunque transcurridos ya 12 años hoy el escenario español y canario sigue en su bucle.